Chile es el segundo país con mayor inversión de aceleradoras de startups

Start-Up Chile, por su parte, se posiciona como la cuarta mayor aceleradora del mundo y la principal si se consideran solo las que tienen dependencia pública.

Más que potencias como Reino Unido, Israel o Canadá. Así de alta fue la suma que invirtieron las aceleradoras de startups en Chile el año pasado, según un reporte de Gust y Fundacity.

En total, fueron US$ 15.096.929 los que destinaron las aceleradoras chilenas en 442 compañías nuevas para apoyarlas en su fase de crecimiento.

De ese modo, el país se ubicó como el segundo mayor mercado del mundo para este tipo de iniciativas, siendo superado solo por Estados Unidos, que sumó US$ 79.159.784 en inversión a través de aceleradoras. «Estas son un factor importante en el apoyo de empresas en etapas tempranas, son una fuente de conexiones y networking muy importante, además de una escuela en la orientación de las diferentes áreas que componen la vida de una compañía», explica Diego Izquierdo, uno de los fundadores de Fundacity, plataforma que ayuda a los inversionistas a seleccionar las mejores ideas y emprendimientos.

De acuerdo a su visión, Chile queda muy bien posicionado en el ranking gracias a lo activos que son los programas de Corfo, lo cual es muy positivo no solo para el ecosistema nacional, sino que también para Latinoamérica, ya que el país fue el precursor de este tipo de programas en la región. «Quizás la falencia del modelo es que aún Chile está muy dependiente de recursos públicos, y para inversionistas de etapas más avanzadas como venture capitals o inversionistas ángeles, eso no es muy positivo», agrega.

Si bien fueron 14 las aceleradoras locales que desarrollaron inversiones el año pasado, cerca de la mitad de los recursos fueron aportados por una sola: Start-Up Chile. De hecho, según datos del informe, la iniciativa creada por Corfo invirtió el año pasado US$ 7.049.130 en startups . «Esto nos habla del gran interés que hay en el ecosistema por desarrollar y apoyar cada vez más emprendimientos. Aún faltan cosas por mejorar, pero vamos por un excelente camino. La inversión es el primer paso para crear un flujo sostenible de startups que permitan dinamizar nuestra economía», comenta Rocío Fonseca, directora ejecutiva del programa, agregando que ahora los desafíos están puestos en aumentar las posibilidades de éxito de las startups a través del perfeccionamiento del ecosistema, con mejores redes de inversionistas y empresas.

Superar a países como Reino Unido, Dinamarca o Israel en términos de inversión puede ser considerado un éxito para Chile, sin embargo eso no necesariamente se refleja en el número de compañías exitosas que emergen del país, pues todavía no cuenta con casos de éxito de alcance global. «Ese es un dato interesante que no esperábamos, para ser sincero. En Chile, el aporte público es muy grande comparado con el privado, mientras que en países como Reino Unido, el privado es más importante, y esto hace que las aceleradoras tengan acceso a otro tipo de conexiones con el mundo privado que pueden dar más valor a las startups que la misma inversión inicial», explica Diego Izquierdo.

Rocío Fonseca, por su parte, cree que todo tiene que ver con la madurez de los ecosistemas, el tiempo y la mentalidad. «Israel y Reino Unido son ambientes más maduros, con al menos 20 años. Ya cuentan con la mentalidad de generar desarrollos tecnológicos disruptivos y escalables a nivel mundial; es un pensamiento instalado en emprendedores, inversionistas y grandes empresas, por lo que la inversión está diversificada en fuentes diferentes», afirma.

Fonseca agrega que el país empezó recién hace unos siete años con ese cambio de mentalidad, «dejar de mirarse el ombligo para ver que hay mercados fuera de Chile» y que aún falta potenciar el ecosistema de venture capitals y que las grandes empresas chilenas se conecten con el mundo del emprendimiento tecnológico de una manera dinámica. «Por ello, aún existe una alta inversión por parte del Gobierno para potenciar todos estos cambios y existen, a su vez, muchas aceleradoras. Si todo el crecimiento sigue normal, debiéramos diversificar de dónde vienen los fondos para invertir en emprendimientos tecnológicos disruptivos. En Chile aún nos falta madurez, y podremos compararnos con países líderes en otros 10 o 15 años», sentencia la ejecutiva.

Latinoamérica sin exit

Con Chile como el principal mercado de la región, América Latina sumó el año pasado US$ 31.563.841 en aceleración para 1.333 startups, ubicándose en la tercera posición, detrás del bloque Estados Unidos y Canadá y de Europa.

Pese a que la inversión de la región es alta, los datos muestran que los esfuerzos económicos parecen ser poco eficientes, especialmente si se comparan con los del bloque Asia y Oceanía. Los países de esos continentes suman una inversión de US$ 16.842.427 (casi equivalente al total de Chile) en 1.295 startups , pero el año pasado consiguieron 34 exits (venta de la compañía a otra), mientras que en América Latina, con el doble de inversión, hubo solo 24 de esas operaciones.

Fuente: Chile es el segundo país con mayor inversión de aceleradoras de startups (El Mercurio)